La radio es simplemente una tecnología para comunicar y transmitir señales mediante ondas de radio. Las ondas de radio incluyen ondas electromagnéticas con frecuencias específicas que van desde treinta hertz hasta 300 megahertz. Los radiotransmisores, fijos o portátiles, pueden diseñarse para recibir o transmitir señales mediante ondas de radio. Dado que las señales de radio solo pueden viajar unos pocos centímetros por segundo, muchos sistemas de comunicaciones utilizan transmisores de radio de corto alcance para las comunicaciones locales. Dos tipos de tecnología de radio son la radio analógica o la radio digital. Mientras que oir radio usa señales de voz o datos, la radio digital usa frecuencias de radio para transmitir datos. La transmisión de información a través de ondas de radio se realiza mediante un transmisor de radio analógico, que puede ser fijo o móvil. Las radios digitales también tienen sintonizadores que permiten a los usuarios sintonizar canales específicos. Otros tipos de transmisores de radio son marinos, satelitales, redes móviles, computadoras personales y dispositivos de seguridad pública. Los transmisores de radio se pueden sintonizar con un diapasón o un campo magnético. Los enchufes se utilizan para hacer vibrar el equipo eléctrica y mecánicamente para cambiar la frecuencia y amplitud de las ondas de radio utilizadas. Este proceso se llama modulación y algunas radios usan este método. Armonizar una onda de radio con una oscilación cambia su longitud de onda, por lo que cambia su frecuencia. Cuando un transmisor de radio emite ondas de radio de longitud variable, se considera que consumen más energía y, por lo tanto, son capaces de transmitir a frecuencias más altas. Para transmitir ondas de radio, un dispositivo llamado transmisor de radio debe tener una línea de visión, generalmente un circuito abierto. Para ello, se utiliza una antena transmisora. La antena emite ondas de radio que son recibidas por el receptor. El receptor convierte las ondas de radio en pulsos electrónicos, que luego se envían desde el transmisor a la parte de la onda de radio que se va a recibir. La radioastronomía utiliza ondas de radio para detectar, identificar y rastrear objetos celestes. Por ejemplo, los radioastrónomos utilizan interferómetros de línea de base muy largos (VLBI) para detectar objetos muy débiles en el espacio. Los radiotelescopios utilizan técnicas de apertura de radio, que implican el uso de un telescopio muy sensible para observar la atmósfera de radio en busca de trayectorias de radiación que podrían provenir de un cuerpo celeste. Los radiotelescopios utilizan una técnica conocida como imagen por reflexión, que utiliza una fuente de radio que transmite y detecta simultáneamente una fuente de fondo. Los radioastrónomos también pueden usar un telescopio espacial de muy pequeña apertura (UV Toledo) para escanear todo el cielo semanalmente en busca de partículas de polvo heladas, pequeñas, brillantes y de movimiento rápido.